domingo, 30 de marzo de 2014

Jaquetón, ¿primer indulto de la historia?

   Ocurrió en Madrid, en la tercera corrida de abono del año 1887, domingo 24 de abril. Los toros pertenecían a la torada del "cura de Solís" (don Agustín Solís), de Trujillo, antes del Marqués viudo de Salas. Los toreros anunciados fueron Francisco Arjona Reyes, Currito (hijo del célebre Cúchares); Salvador Sánchez, Frascuelo; y Ángel Pastor.
   En cuarto lugar se lidió Jaquetón (nº 11), toro que ha pasado a la historia como uno de los más bravos que jamás se han lidiado, y también, como el primer indulto acaecido en la historia y en la plaza de Madrid. Pero no fue tal, tras bucear en la vasta hemeroteca de la Biblioteca Nacional y en los pocos libros que poseo, las conclusiones que saco difieren de la historia que ha corrido de boca en boca durante tantos años, bulos que se hinchan con el paso del tiempo, tan dados en el mundo de los toros. Como aquel que se cuenta de Gallito, cuando debutó en Madrid de novillero el 13 de junio del año 1912 cambiando los novillos del Duque de Tovar por toros de Olea. Falso.
 
 
La Lidia (04/11/1889) celebraba la contratación de Currito para la temporada de 1890 con un dibujo del Sr. Chavez. Torero querido y bien tratado por la afición madrileña, él hubo de pechar con Jaquetón
 
 
  El festejo dio inicio a las cuatro de la tarde bajo un clima agradable, la entrada fue buena, "con algunos pequeños claros en las gradas", mas algunos periódicos afirman que "los reventas fueron perseguidos". El palco regio estaba ocupado por la Infanta Isabel, los Duques de Montpensier y la Condesa de París. Pero vayamos al meollo de la cuestión, la corrida en conjunto fue buena, muy buena o sobresaliente, según criterio del revistero; Cossío habla de 48 varas en total, por 20 caídas y 20 jacos para el arrastre.
   La terna quedó regular: Currito, con el toro que abrió plaza anduvo mal con la muleta y sin acierto a espadas; Frascuelo dio una estocada de las suyas al quinto, "arrancando corto, derecho y saliendo limpio de la suerte"; y Ángel Pastor no tuvo material en el tercero y dejó una buena estocada en el último de la corrida.
   Agustín Solís se hizo con la vacada del Marqués el mismo año de lidiarse Jaquetón, si bien la ganadería venía de cuajar una gran temporada el año anterior y por lo general era bien recibida en Madrid aunque su comportamiento solía ser irregular. Como ejemplo de las dudas que generaba esta ganadería, Paco Media-Luna, en su Diccionario Cómico Taurino, dando significado -irónico y atinado significado- a varios hierros ganaderos, se refiere a la "S" del Marqués de Salas diciendo "¿saldré bueno?".
 
 
Coplilla escrita por Sobaquillo (Don Mariano de Cavia) en El Liberal del día después
 
 
  En lo tocante a la presentación del famoso Jaquetón, habiendo recabado varias reseñas y opiniones, da como resultado una fachada sin exageraciones y unos pitones astifinos aunque justos para la exigencia de la plaza. "Cárdeno, chorreado y algo escurrido de carnes" dice Cossío; "de hermosa lámina y adelantao de cuerno" según El Imparcial; en El Toreo lo reseñan "cárdeno, cornicorto, delantero, un tanto sacudido de carnes y con un pequeño defecto en el lado izquierdo".
   Manuel el Sastre, Canales, Paco Fuentes y Manitas fueron los picadores que se enfrentaron a la bravura de Jaquetón. En El Enano, Tiberio escribe: "Superior con la garrocha Paco Fuentes, que es hoy uno de los mejores picadores, por no decir el número uno, y muy bien el Sastre. En estas corridas que pegan es donde se conoce a los picadores de verdad".
   No se puede precisar los números exactos de Jaquetón en el tercio de varas, según el revistero la ecuación varía. Si partimos de la reseña de Cossío, cuento 9 entradas, 6 caídas y 5 pencos; 9 entradas y 6 jacos relata El Enano; en La Correspondencia afirman que "cuantas veces entró a los picadores los dejó en tierra, mató 6 caballos"; El Imparcial refiere "10 varas recargando, volteando a jinetes y caballos"; Sobaquillo en El Liberal habla de 11 puyazos derribando en todos, matando 7 caballos.
   Bien es verdad que los números de Jaquetón no son tan espectaculares en comparación con la leyenda que lo ha hecho famoso; peor resultado extraemos si lo comparamos con otros toros célebres que se lidiaron por aquella época y presumen de números mucho mejores. En su descargo hay que decir que los toros nada tienen que ver con las matemáticas. 
 
 
Dibujo de Perea dedicado a Jaquetón. La Lidia del lunes 23 de mayo de 1887
 
   El animal acometió con furia desde salida, desarrollándose el tercio con mucha rápidez y, más allá de las veces que acudió a los picadores, la importancia de Jaquetón radica en el tremendo poder, codicia y bravura que derrochó en los caballos, derribando prácticamente en cada acometida, yendo a más continuamente. Se desconoce el límite de tan extraordinario animal si no hubiera sido por una coz que lo dejó convulso cuando Jaquetón hacía hilo tras un caballo, después de descabalgar al picador Canales.
   En el fragor de tan movido tercio de varas, Ángel Pastor tropezó con un caballo inerte y cerca estuvo de sufrir una cogida de Jaquetón si no es por un quite providencial de Pulguita cuando el espada estaba a punto de convertirse en presa de Jaquetón.


Cuando hay un toro bravo en la arena ya se sabe... (El Imparcial sobre el tercio de varas de Jaquetón)

     La "versión oficial" dice que Jaquetón recibió una coz cuando llevaba siete u ocho puyazos con una codicia sensacional, de una u otra forma el burel quedó atontado, y el público pidió insistentemente que no se matara a tan sublime ejemplar. Entretanto, Corito clavó un par y se ganó una tremenda bronca. El presidente, don Juan José Giménez, accedió a tal demanda pero Jaquetón ignoró la parada de bueyes, por lo que Currito hubo de darle muerte al tercer golpe de descabello.
   Esa es la historia. El indulto de Jaquetón no llegó a materializarse y, en cualquier caso, el público lo solicitó al ver que el animal se había lastimado y no podía continuar la lidia, pues no querían ver morir en la plaza tan magnífico ejemplar encontrándose en un estado tan lamentable, otorgándole la indulgencia en aras de una posible recuperación. La petición se produjo por la lesión, si no, el público de aquel momento hubiera solicitado "¡más caballos!" hasta exprimir la bravura de Jaquetón al máximo posible; quién sabe cuantas varas hubiera llegado a coger. Fue un conato de indulto concedido por la presidencia debido a causas sobrevenidas.
   Jaquetón, como no podía ser de otro modo, fue despedido con una atronadora ovación cuando era arrastrado por el tiro de mulillas, después de arrastrar toda la caballería víctima de su poderío, como era costumbre cuando el comportamiento de los toros era bravo, pues en caso contrario eran arrastrados en primer lugar, antes que los caballos.


Con esta maestría lo contó don Mariano de Cavia


  Las cosas no podían quedar ahí, mucho se habló de tan singular toro y todavía habrían de venir nuevas hipótesis acerca de la malograda vida de Jaquetón. El número de La Lidia del día 2 de mayo, en una nueva vuelta de tuerca, da la exclusiva sobre la lesión de Jaquetón afirmando que fue un derrote seco a un caballo que perecía en la arena. Ni siquiera valoran la coz de un penco, causa que tuvo más partidarios; en este caso hablan de un puyazo, motivo que también se barajó, llegándose a comentar que una vara perforó un pulmón de Jaquetón.

La Lidia aportó nuevas razones acerca de la lesión de Jaquetón

 
  Cuenta Cossío en su obra: "Hace pocos años vimos en Trujillo la cabeza del toro Jaquetón. Está disecada al estilo antiguo, es decir, que puede decirse que está estrictamente la cabeza, sin apenas cuello. Su aspecto es insignificante, muy cariavacado, muy corto de pitones y muy afilados, muy descarnada y estrecha. Su dueño, un empleado de la casa de Banca Artadoitia y Cortés, la cuida con esmero, preservándola en lo posible de las inevitables contingencias del tiempo". 
  Desconozco si Banca Artadoitia y Cortés son descendientes de Agustín Solís, pero antes de poseerla ellos, la tuvo el propio ganadero por lo que cuentan en varias crónicas.

La Correspondencia de España


  Jaquetón ha permanecido siempre vigente en el mundo del toro, durante mucho tiempo los cronistas citaban su nombre como expresión máxima de bravura. Se ha utilizado para bautizar reatas de muchas ganaderías; en la jerga taurina, cuando se ve un gran toro por bravura y fiereza se dice que era un jaquetón, aunque hoy esta expresión ha caído en desuso. Incluso, yo he llegado a escuchar a amigos míos que no tienen ni idea de toros, referirse a una mujer de "buenas hechuras" como una jaquetona y, dejando a un lado la controversia de este uso, me parece impresionante que una persona iletrada en toros evoque el nombre de Jaquetón más de ciento veinte años después.

Simpática anécdota en El Liberal del 20 de mayo de 1887 haciendo alusión a Jaquetón

 
  Los curiosos sobre la casta de procedencia del toro Jaquetón podrán encontrar una buena reseña sobre los antecedentes de la ganadería del cura de Solís y avatares del Marqués de Salas en la edición de El Toreo del día 21 de mayo de 1894. Cuentan que el Marqués de Salas formó su ganadería con un hato de Toros de la Tierra (reses colmenareñas) de D. Pedro Varela y un semental de D. Antonio Miura. Dato interesante, ya que por aquella época los toros de nombre Jaquetón eran habituales en la ganadería de Miura... lo que nos puede dar una explicación sobre la capa de Jaquetón, toda vez que los toros jijones no se prodigaban en pelos cárdenos.
  Sin embargo, don Luis Fernández Salcedo, en el libro Trece ganaderos románticos, dice: "A su muerte (por don Pablo Bañuelos, en el año 1853), se divide toda su hacienda en tres partes, que se adjudican a sus hijos Manuel, Julián y Prudencia Bañuelos y Salcedo. Doña Prudencia, que entonces era muy joven, vende su parte a un vecino de San Agustín. Posteriormente, esta porción sirve para formar la ganadería del Marqués de Salas, con sementales de Muñoz y de don Manuel Bañuelos". Fernández Salcedo coincide con la reseña de El Toreo ya que, al fin y al cabo, lo de D. Pedro Varela venía de Bañuelos; de lo que no habla es del toro miureño.


  Para terminar dejo los versos que en La Lidia dedicaron a Jaquetón, en la edición del día 23 de mayo del año de la efeméride, los cuales pasan a formar parte de este blog de manera permanente, en honor al grandioso toro Jaquetón, ejemplo de bravura, poder y fiereza entre los de su especie.

La tarde clara y hermosa
de un día primaveral,
convidaba, bulliciosa,
a asistir a la famosa
fiesta hispano-nacional.
La madre tierra lucía
sus más esplendidas galas,
el gran circo contenía
al público que acudía
a ver seis toros de Salas.
El clarín volvió a sonar;
volvieron a rechinar
las puertas de los chiqueros,
y asomo, en cuarto lugar
un toro de los primeros.
Cárdeno el pelo y sedoso
bien puesto, fino, nervioso,
los cuernos en proporción,
bravo, duro, codicioso,
y por nombre Jaquetón.
Al salir pausadamente,
giro la mirada ardiente
por el ancho redondel,
y se abalanzó a la gente
cual a la caza el lebrel.
Ni a contener su pujanza,
ni a resistir su fiereza,
el arte sereno alcanza,
ni el caballo, ni la lanza,
que es un ciclón su cabeza.
Como arrolla el huracán
al objeto más sencillo,
lo mismo a su impulso van
el peón y el alazán
por el espacioso anillo.
Tan ruda es la acometida,
tal la furia de la res,
que deja en cada embestida,
la tierra en sangre teñida
y un cadáver a sus pies.
Y su indomable denuedo
siembra a punto de tal suerte
la consternación y el miedo,
que en el arenoso ruedo,
se confunden vida y muerte.
Hasta que el toro, asombrado,
ante su propia bravura,
y ciego, desesperado,
frenético, es atacado
del vértigo y la locura;
quedando en tal situación
que nadie da explicación
satisfactoria del hecho;
la cabeza sobre el pecho
y en horrible convulsión.
Absorta la plaza entera
ve como al dolor latiera
su altiva cerviz humilla,
e impide que la cuadrilla
se aproxime tan siquiera
a Jaquetón, que abatido,
descoyuntado, rendido,
loco de rabia y de pena,
cae al fin sobre la arena
muerto, sí, más no vencido.
Al arrastrar los despojos
 de tan soberbio animal,
con cariño hacia el corral,
le siguen todos los ojos,
y un aplauso general
resuena en la inmensa plaza,
como tritubo elocuente
al toro hermoso y valiente;
de su fina y noble raza,
ejemplar sobresaliente.

Mariano del Todo y Herrero
 

Una bronca en Zaragoza


  De lo ocurrido en Zaragoza, con ocasión del último espectáculo taurino de la temporada de 1901, decía la Prensa de la capital aragonesa:
 
   "La fiesta taurina de ayer dio margen a la última bronca y a un escándalo que llegó a trascender fuera del circo taurino, siendo precisa la intervención de las autoridades y de la fuerza pública. Anunciaba el cartel la muerte de seis reses de Carreros. Habían fenecido tres y una volvió al corral, cuando se dio suelta a la quinta, que era de Constancio Martínez y no de Carreros. El público protestó semejante cambio y el Presidente dispuso salieran los cabestros.
  Se da suelta luego a otra res de igual procedencia y la bronca aumenta, llenándose el ruedo de espectadores. El animalito volvió al corral y aparece en el ruedo otra que torean los protestantes, retirándose la cuadrilla. Después otro, otro y otro. La bronca continuaba en aumento y aquí llegó a su período álgido; comenzaron a caer al anillo tableros de la barrera, puertas de la contrabarrera y tabloncillos de grada, en donde ya ardían hogueras de papel.
 
  La res, sujeta por el público, fue sacrificada sobre la candente arena y arrastrada después puertas afuera de la Plaza hasta la calle de la Escopetería. Querían unos llevarla al paseo de la Independencia, y a instancias de otros se intentó meterla en el Hospicio; pero aquí cerraron las puertas y luego se apoderó de la res la Guardia Civil, no logrando los amotinados sus deseos.
  Parejas de la benemérita custodiaron el animal muerto, hasta que llegó  un carro y lo condujo a la Plaza. Entonces se oyeron voces de: ¡A casa del empresario! ¡Al circo! ¡A Pignatelli!, y con dirección al domicilio del primero marcharon los revoltosos.
  Situáronse los que formaban uno de los grupos frente a la casa donde habita el Empresario, la que apedrearon con furor, haciendo añicos el cristal de color que sirve de letrero a la Administración de loterías, propiedad de dicho señor, y varios cristales más de los balcones del estresuelo. Los del grupo cogieron un cartel anunciador de las funciones teatrales que habían de celebrarse en los coliseos de que el Sr. Lapuente también es empresario y le pegaron fuego. Entretanto, otro grupo que habíase dirigido al teatro circo, apedreó éste, rompiendo las dos bombas de los arcos voltaicos que alumbraban la entrada del coliseo y todos los cristales, proponiéndose invadir a viva fuerza la sala; pero acudieron las autoridades, que consiguieron reprimir el tumulto.
  Cuando en esto estaban, un guardia municipal llegó precipitadamente a dar parte que en el teatro Pignatelli otro grupo estaba apedreándolo. Dirigiéronse allí las autoridades, cesando los grupos en su actitud al verlas. Habían roto a pedradas los faroles de los soportales, los arcos voltaicos y la taquilla, e intentaron violentar las puertas del teatro, valiéndose de gruesas piedras y palos; pero aquellas no cedieron.
 
  El alcalde preguntó a los grupos si querían que la res sacada de la Plaza fuese para La Caridad. Respondieron todos afirmativamente, aplaudiendo la proposición. El Gobernador prometió que así se haría, imponiendo además a la Empresa un severo castigo, aconsejando a los grupos que se disolviesen, una vez que la autoridad prometía seriamente que en lo sucesivo cuantos abusos tratara de cometer la Empresa serían reprimidos.
 
  Además de los sucesos reseñados y llevados a cabo para vengar los atropellos que venía cometiendo el empresario Sr. Lapuente, ocurrieron otros muy significativos de protesta, frente a la Administración de loterías del Sr. Bernal, coempresario de la Plaza. Los grupos arrancaron la anaquelería de cristales, el rótulo y un cartel anunciador, prendiéndoles fuego, y arrojaron piedras a los balcones de la casa."
 
  Ahora cuatro líneas por nuestra cuenta, decía un acreditado periódico taurino de Zaragoza: "Lo que ayer sucedió, más que por la importancia de la infracción en sí, es consecuencia lógica de los muchos abusos cometidos por la Empresa, abusos uno y otro día por nosotros censurados sin ser oídos. Llegó el Pilar; la Empresa se creyó con derecho a jugar con fuego, soltando toros de desecho, y pasaron. Siguió el abuso en crescendo en cada función, llegando su avilantez a soltar un bicho en la famosa novillada de saldo. Como eso también pasó sin que el público protestara, creyose la Empresa con derecho a perderle ayer el respeto, hasta el punto de no anunciarle el cambio de una de las reses. La Presidencia, hay que reconocer que no supo o no quiso cumplir con su deber. La cosa no tiene vuelta de hoja: ¿no se cumple en todas sus partes el cartel, único contrato que la Empresa hace con el público? Pues devuélvase el dinero, que eso era lo que el público pedía, porque a ello tenía perfectísimo derecho. No quiso hacerse así, y el público se tomó la justicia por su mano, excediéndose en su revancha, pero... justificada en parte, cuando las autoridades consienten se le atropelle".
 
Del Doctrinal Taurómaco de "Hache".
 

Béziers presenta el cartel que anunciará su feria

 

Es obra del joven Sebastian Cabanel

Béziers ha dado a conocer el cartel anunciador para su próxima feria, obra del joven Sebastian Cabanel. Esta obra fue elegida de entre las 130 que pasaron las condiciones de este concurso de carteles, organizado por cuarto año consecutivo y que está siendo todo un éxito. El magenta y el negro son los colores principales de una obra muy novedosa. 

Santander define las ganaderías para su Feria de Santiago

 

El ciclo se desarrollará del 20 al 26 de julio y constará de 7 festejos

 
El presidente del Consejo de Administración de la Plaza de Toros de Santander, Constantino Álvarez, ha hecho oficiales las ganaderías que se lidiarán en la próxima Feria de Santiago. Los hierros elegidos para los siete festejos son: Parladé y Juan Pedro Domecq para la novillada, Sánchez y Sánchez para rejones y 5 corridas de toros con los hierros de Garcigrande, Montalvo, Alcurrucén, Puerto de San Lorenzo y Victorino Martín, para la lidia a pie. La Feria de este año se celebrará del 20 al 26 de julio y que mantienen la línea iniciada en 2012 recortando en dos el número de festejos .
“El Consejo de Administración de la plaza de toros de Santander está trabajando para cerrar unos carteles de calidad, siguiendo la línea que ha caracterizado, año tras año, a la Feria de Santiago”, explicó el presidente, quien indicó que, en las próximas semanas, se dará a conocer el cartel completo del ciclo taurino santanderino.
Saiz Bustillo informó por su parte que la feria comenzará el domingo 20 de julio con una corrida de rejones en la que actuarán Pablo Hermoso de Mendoza, Diego Ventura y Roberto Armendáriz, a la que seguirá el día 21 la novillada. El concejal explicó que la Corrida de la Beneficencia se celebrará el día 25, coincidiendo con la festividad de Santiago y cerrará la Feria el día 26 de julio, una corrida con toros de Victorino Martín. 

jueves, 27 de marzo de 2014

Escribano y los Miura fomentan el mano a mano de Sevilla

 

Luque no pudo asistir a la cita por encontrarse en Madrid

 
El matador de toros Manuel Escribano y los ganaderos Eduardo y Antonio Miura han asistido a un acto en Gerena en el que se ha presentado a los aficionados de esta localidad sevillana el cartel que abrirá la temporada taurina en la Real Maestranza de Sevilla.
Por primera vez en la historia dos toreros de Gerena, el propio Manuel Escribano y Daniel Luque, que excusó su presencia por tener un compromiso en Madrid, torearán en Sevilla mano a mano en un Domingo de Resurrección y ante una corrida de Miura. Esta circunstancia ha levantado gran expectación en el pueblo que se vio reflejada en el acto celebrado en el Centro Cívico de la localidad, al que asistieron numerosos aficionados.
La alcaldesa de Gerena, Margarita Gutiérrez Nogales, fue la encargada de presidir el acto, que se desarrolló a modo de breve coloquio con participación de todos los miembros de la mesa.
Manuel Escribano mostró su gran ilusión por esta cita: "Hombre, sabía que iba a torear la de Miura y que podía entrar en el Domingo de Resurrección, pero cuando vi que coincidían ambas cosas, y que además era mano a mano con Daniel Luque, pues me hizo mucha ilusión. Creo que es una corrida fundamental para ambos".
Por su parte, los ganaderos coincidieron en destacar el cambio de fecha: "Nos han sacado de nuestro domingo de Feria y eso ha hecho que la corrida haya levantado mucha expectación. Esta circunstancia dobla nuestra responsabilidad", dijo Eduardo.  Miura lleva 74 corridas seguidas en Sevilla, siendo la suya una tarde tradicional que congregaba a mucho público de los pueblos: "Gracias a ellos, a todos los que iban a Sevilla a ver nuestra corrida año tras año, estamos aquí hoy", concluyó Antonio Miura.
El mano a mano entre Manuel Escribano y Daniel Luque con toros de Miura se celebrará el día 20 de abril a las seis y media de la tarde en la plaza de toros de la Real Maestranza de Sevilla.

Atractiva política de precios en las novilladas de Madrid

 

Tendidos de sombra y sol y sombra por 10 euros y tendidos de sol por 7 euros

Además, con la adquisición de una localidad pueden entrar de forma gratuita hasta dos menores.
La empresa Taurodelta ha puesto en marcha una política de precios muy atractiva encaminada a la promoción de las novilladas en la plaza de toros de Las Ventas de Madrid. Para el festejo de esta tarde, al igual que para las tres novilladas programadas para los próximos días 30 de marzo y 6 y 13 de abril, se ha establecido una entrada única y general en los tendidos de sombra y sol y sombra de 10 euros y en los tendidos de sol de 7 euros. Además, con la adquisición de una localidad pueden entrar de forma gratuita hasta dos menores.

Rejones en Aguilafuent

 

La localidad segoviana de Aguilafuente acogerá el próximo Sábado de Gloria, 19 de abril, un festejo de rejones organizado por el empresario y ganadero Luis Antonio Rodríguez "El Taru". El espectáculo, que contará con reses de su propia ganadería, origen Vega Villar, contará con la presencia de los rejoneadores Álvaro Montes, Leonardo Hernández y Manuel Moreno

Zúñiga anuncia una demanda por prevaricación contra el Ayuntamiento de Burgos

 

El Consistorio desestima las cartas de compromiso de toros y toreros presentadas por el gestor vallisoletano y acepta en su totalidad las de Serolo

El empresario Carlos Zúñiga ha anunciado en rueda de prensa que llevará frente al juez al Ayuntamiento de Burgos por prevaricación, tras conocer los detalles de la baremación del concurso de adjudicación de El Plantío, en el que han otorgado la máxima puntuación a Serolo tras desestimar las cartas de compromiso de toros y toreros presentada por la empresa Circuitos Taurinos, capitaneada por Zúñiga. La demanda -que se oficializará en los próximos días- se hará extensiva a los técnicos encargados de efectuar la baremación.

Zúñiga entiende que tanto los criterios de admisión a concurso como el modo de puntuación, han decantado el concurso. “Una empresa formada en febrero de 2014 en ningún caso puede acreditar la experiencia que requiere el pliego de condiciones para ser admitida a concurso”, ha manifestado, puntualizando su abogado, Javier Sanz Fernández: “Es algo que clama al cielo. Los criterios de admisión los marca la administración y si exigen haber dirigido una plaza de segunda como mínimo, hay que acreditarlo”.

Sin embargo, el asunto más polémico y que más suspicacias levanta a juicio de la familia Zúñiga es el relativo a las cartas de compromiso: “Prevarican los técnicos cuando deciden eliminar nuestra propuesta de toros y toreros atendiendo a un criterio partidista y más cuando a diferencia de la otra empresa en nuestros compromisos incorporamos fotocopias originales de los Documentos Nacional de Identidad de todos los firmantes, prueba irrefutable de su autenticidad. Hemos presentado DNI de apoderados, toreros y ganaderos, menos uno, que no quiso darlo y simplemente dio la carta”.

El Consistorio burgalés ha rechazado las cartas presentadas por Zúñiga por entender que extender un documento con la palabra "dispongo" no es sinónimo de compromiso. “¿Qué quieren que ponga?”, pregunta el empresario. “No podemos poner tengo comprada mientras no sea empresario. ¿Qué más compromiso puede ser que presentar una carta del ganadero o del torero con su Documento Nacional de Identidad admitiendo que toreará en Burgos cuando seamos adjudicatarios?”.

Tal y como adelantamos el pasado viernes, la Mesa de Contratación ha baremado las dos ofertas presentadas al concurso de El Plantío. Se ha elevado la propuesta de adjudicación y previsiblemente mañana miércoles, se hará oficial la decisión de dar por ganador a la empresa Iniciativas y Gestión de Toros –marca con la que concurre Serolo- del concurso para la temporada 2014.

Collado Mediano, con ganaderías

 

La localidad madrileña programa dos novilladas con picadores y una sin caballos para el mes de agosto

 
El ayuntamiento y la Comisión de Fiestas de Collado Mediano han dado a conocer las ganaderías de la próxima feria de novilladas que se celebrará en esta localidad madrileña los días 22, 23 y 24 de agosto. El ciclo se compondrá de una novillada sin caballos y dos novilladas con caballos.

Viernes, 22 de Agosto: Novillada sin caballos de Miranda de Pericalvo. Este festejo se enmarca dentro del Certamen "Camino hacia Las Ventas.

Sábado 23. Novillada con caballos de la ganadería de José Escolar, que lidiará por cuarto año consecutivo en la feria.

Domingo 24. Novillada con caballos de la ganadería de Montalvo.

Arranca la renovación de abonos en Sevilla

 

Buen ambiente en el primer día de apertura de las taquillas

 
La venta de nuevos abonos para la temporada taurina de Sevilla ha comenzado esta mañana con muy buen ambiente, formándose colas a las puertas de las taquillas de la plaza. Una vez cumplido el plazo de renovación de abonos, la Empresa Pagés ha abierto la venta de abonos nuevos que se extenderá hasta el próximo sábado. Las taquillas de la plaza (Paseo de Colón) permanecen abiertas en horario de 10 de la mañana a 2 y de 5 a 8 de la tarde. El plazo va del 25 al 29 de marzo, ambos incusive.
La Empresa Pagés ha puesto a disposición un sistema de reserva de entradas en cualquier fecha. Se puede realizar por correo electrónico en: taquilla@plazadetorosdelamaestranza.com, o directamente en el siguiente enlace: www.lamaestranza.es/encargo_acceso.asp.

Manuel García Cuesta El Espartero

Manuel García Cuesta (Sevilla, 18 de enero de 1865 - Madrid, 27 de mayo de 1894), más conocido como El Espartero, fue un torero sevillano de inusitado valor que resultó muerto a los 29 años tras una cornada infligida cuando entraba a matar, por el toro «Perdigón» de la ganadería de Miura en la Plaza de Toros de Madrid.

Biografía

Su verdadero nombre fue Manuel García Cuesta, el apodo El Espartero procede de la actividad profesional de su padre, que poseía una espartería en la Plaza de la Alfalfa de Sevilla.
Tomó la alternativa en la Plaza de toros de Sevilla el 13 de septiembre de 1885 de manos de Antonio Carmona, conocido como «El Gordito». Pronto se convirtió en uno de los toreros más populares de su tiempo y sobre él se contaban mil anécdotas, como las célebres frases que se le atribuyen: «Mas cornás da el hambre» que pronunció cuando un banderillero le advirtió sobre las dificultades de un animal y «Que alegría tenía aquel toro, en menos de cinco minutos me tiró más de cincuenta cornás», mientras dialogaba con el cirujano que le atendía de una gravísima cornada
Tenía fama de generoso, muchos comentaban que su bolsa se llenaba rápidamente y enseguida se vaciaba de nuevo por sus donativos. Uno de sus pases más característicos era citar al toro de lejos con la muleta plegada en alto, para luego desplegarla a medida que el animal avanzaba. Muchos años después otro torero sevillano, Pepe Luis Vázquez lo ejecutó de la misma manera, según las explicaciones que recibió de su abuelo que había pertenecido a su cuadrilla.
Tras su muerte, el cadáver embalsamado fue trasladado de Madrid a Sevilla, donde lo esperaban más de seis mil personas, el gremio de cocheros acordó trasladar gratuitamente al público al Cementerio de San Fernando de Sevilla donde se celebró el entierro. El paso del cortejo fúnebre fue presenciado por una gran multitud y 20.000 personas, la mayoría mujeres, pasaron ante el cuerpo del diestro en la capilla fúnebre.En su tumba, se representa simbólicamente la muerte con una columna rota por la mitad.
Varios escritores se han servido de la vida de El Espartero para sus narraciones, como Vicente Blasco Ibáñez en su novela Sangre y Arena, Fernando Villalón, que le dedicó un poema, y el periodista y escritor Fernando Martínez, que relata su vida en la novela La tarde más larga, publicada por Almuzara.

La masacre del campo bravo

La masacre del campo bravo
 Es habitual encontrar artículos o aficionados con un razonamiento muy simple por el cual el sector torista de la plaza de Madrid es el único culpable de todos los males en lo que a perdida de encastes se refiere. Se dice que, ignotizado por ciertos críticos taurinos, las demandas de toro grande y cornalón han propiciado un efecto de autodestrucción. El último caso en el blog Bravura y nobleza
  Reducir la preocupante perdida o marginación de encastes a una afirmación tan simple no se ajusta con lo sucedido, es una afirmación simple, falaz e injusta. El aficionado cabal debe buscar los porqués más allá de cuatro señores con un pañuelo verde, hay un trasfondo mucho más complejo, una historia y una evolución. Son muchas y variadas razones, la crisis de los encastes es un problema que se viene gestando desde hace muchos años.
  Adelante, pasen y lean.

 


   Madrid plaza torista
   Hay que subrayar que Madrid históricamente es plaza torista, no se trata de una corriente moderna ni mucho menos, antaño fue tierra de toros, y todas las provincias que la rodean también lo fueron. En otros tiempos era costumbre que las ganaderías de diferentes regiones de España compitieran entre sí en la Villa y Corte; y es que antes que cualquier torero, la afición de Madrid tomó partido por los toros.

Toros de Castilla y toros de Navarra, a triunfar en buena lid



  Benjumeas al matadero
  Joselito ya marcó la tendencia a seguir, que aun siendo uno de los toreros más portentosos e inteligentes que ha dado la Tauromaquia, el ganado que más estoqueó fue el de Murube-Carmen de Federico, con 131 reses en total. Joselito, que no rehúye cualquier tipo de ganado en plazas de máxima exigencia, se decanta por el tronco Vistahermosa. En aquel tiempo, los toros navarros y jijones ya son muy escasos. 

Un toro de antes de la Guerra, rama Vistahermosa. De aquí vendrán la inmensa mayoría

  La Guerra y sus consecuencias
  Nunca en la historia de la Tauromaquia salió por toriles un animal tan birrioso como en los años de posguerra, la situación era muy precaria y había que aceptarlo, no había un pan que echarse a la boca así que tampoco se podía pedir animales lustrosos en la plaza. Además, en la mayoría de ocasiones se lidiaban utreros y, para más inri, la Guerra hizo perecer muchas ganaderías que proporcionaron sustento alimenticio, otras tuvieron la mala fortuna de encontrarse en zonas de combate. Hay que tener presente esta etapa para entender todo lo que vino después.

  El Monstruo, apogeo de figuras y triunfalismo
  Manolete es otro puntal, su toreo de engaños y faenas largas requiere un toro de mucha nobleza para que aguante faenas largas, por supuesto, tiene que ser bravo y embestir. Los ganaderos buscan ese toro y muchos lo encuentran, posteriormente, en los cincuenta y los sesenta, hay un ramillete muy amplio de hierros que embisten y son bravos, de multitud de encastes, solo que en la mayoría de los casos no cumplen los cuatro años. Los sesenta y principios de los setenta (hasta el rabo de Palomo Linares en el año 72) es el periodo de mayor triunfalismo en Las Ventas, animales bravos y un elenco de figuras como nunca ha habido en la historia que hacen frente a toros de variados encastes.


    ¿Niño o adulto?
  Afición, medios de comunicación y algunos profesionales (don Antonio Bienvenida o Victorino Martín) ejercen una fuerte presión denunciando el afeitado de los toros, con Manolete y El Cordobés como cabezas de turco. Por otra parte, la edad y el nulo o escasísimo remate de las reses será otro motivo de queja muy importante. Fruto de ello, la Administración (Ministerio de la Gobernación en aquel tiempo) toma cartas en el asunto, a partir del año 69 se controla la edad de las reses a través de los libros de ganadería y los erales deberán ser herrados con el año ganadero que corresponda. De un vistazo, los aficionados podrán saber la edad del toro. A partir de entonces, muchos hierros dejan de embestir con tanta alegría, se lidian toros con un año y cien kilos más, hace falta más casta para compensar tanta nobleza. Diferentes castas se verán muy perjudicadas por ello. Da comienzo la era de los sobreros.


  Sonrisa de oro
  Victorino Martín se presenta en Madrid en el año 68 con un encierro que toma la friolera de 24 puyazos, es la sensación de los aficionados, el ganadero de Galapagar representa el toro íntegro, de edad, casta y trapío que tanto demandaron los aficionados. Con Victorino surge lo que se denominó, a veces con sorna, como "torero legionario", que se dedica a ganaderías de este tipo. Las figuras siguen matando de todo, pero ahora con menos frecuencia o para hacer una "gesta", parece que con un año más y en puntas ya no hace tanta gracia la variedad de encastes. La variedad de encastes va quedando cada vez más reducida a los "toreros expertos".
 
Capitán, de Hernández Plá, se crece en varas el 15 de mayo de 1979, uno de los toros más bravos que se han visto en Las Ventas. El encaste Santa Coloma, que dicen chico (no estoy convencido de ello), siempre ha sido querido y mimado por la afición madrileña

 
  Choperas, choperitas, choperones
   A principios de los ochenta se hacen con la plaza capitalina los hermanos Jesús y Manolo Chopera, tras unos años lamentables con Diodoro Canorea primero y Martín Berrocal después. Manolo Chopera será la cabeza visible, un empresario que ya quisieramos ahora los aficionados, de tres mil abonados se pasó a dieciocho mil que la Comunidad tuvo que poner como tope. Pero también hay cosas negativas, los anteriores gerentes no dieron con la tecla sobre el manido "toro de Madrid", se sucedieron numerosos escándalos. Chopera tenía la solución: los veterinarios imponen en los corrales unas exigencias sin parangón, por los toriles de Las Ventas sale un mastodonte con cuernos que unas veces funciona y otras rueda por la arena.
  San Isidro se convierte en una maratón en la que Chopera incluye, como novedad, la semana torista, con hierros cuyos propietarios buscan casta como ingrediente principal. El resto del ciclo, perdón, el 90% del ciclo, lo copan ganaderías del tronco Domecq, con hierros cuyos propietarios buscan un toro que se adapte al toreo que esté de moda.
  La variedad de encastes queda reducida a la semana torista de San Isidro y el tórrido verano madrileño.

  El ladrillo
   Así hasta llegar a nuestros días, pero "endegenerando".  La moda del empresario acaudalado venido a ganadero ha hecho mucho daño, los habrá buenos y los habrá malos, pero la inmensa mayoría ha adquirido una punta de ganado del encaste dominante, muy pocos se han atrevido con los minoritarios. Las vacadas se multiplican con reses del tronco Parladé - Juan Pedro Domecq.
 

  La gran mentira
  Si se analizan los encastes uno por uno, realmente sólo hay dos damnificados: Contreras y Coquilla. Objetivamente y muy a mi pesar, estas sangres no son aceptadas a partir del año 73 en que aparece el toro cuatreño sin lugar a dudas, son toros chicos. Te invito, querido lector, a repasar el resto de sangres del campo bravo, verás que todas tienen un trapío y una conformación que el público de Madrid acepta sin necesidad de protesta.
  Cada encaste tuvo su rumbo y su particulares derroteros que darían para numerosas entradas. Minoría eterna que siempre fue; rechazo de los toreros; crisis de casta; saneamientos que aniquilan...

Los antiguos decían: "toros de Hidalgo Barquero, que nos devuelvan el dinero"; este encaste siempre fue blando, propenso a las caídas. Vemos un ejemplar de Jodar y Ruchena en los corrales del Batán.

 
  Esplá, cómo te añoramos
  No sé dónde ubicar la crisis de toreros largos, dominadores y conocedores de todo tipo de toros, en comparación con ese otro tipo de coletas que practican un toreo más uniforme, obviando el comportamiento del animal. Puede ser que en realidad, a lo largo de la historia, los toreros dominadores siempre han escaseado. Este asunto, a mi modo de ver, es vital para la buena salud de los encastes ganaderos. Nada mejor que visitar esta fabulosa entrada de José Morente para refrescar la cuestión que planteo.

  Fin
  Llegados a este punto, sostengo, con toda rotundidad, que los llamados críticos derrotistas y los beligerantes aficionados madrileños no son el único motivo de la preocupante situación vigente. Si se estudian las Castas perjudicadas una por una veremos que no es así.

Ganaderia Miura

Miura es la denominación popular de un encaste de toros de lidia de características singulares forjada durante varias generaciones de una familia ganadera, desde 1842 hasta la actualidad. Su cría se realiza en la finca Zahariche en la localidad sevillana de Lora del Río.

 


Historia

En su origen, Juan Miura la forma en 1842 con la cruza de 220 vacas de Gil de Herrera, 200 vacas y novillos de José Luis Alvareda, todas procedentes de Los Gallardos en El Puerto de Santa María, que corre toros en Madrid por primera vez en 1792, y de José Rafael Cabrera y Angulo, natural de Arcos de la Frontera (1738), cuyo ganado pastaba en el término de Utrera; ambas procedentes a su vez de los frailes cartujos y dominicos de Jerez y de Sevilla, que antes de la desamortización de Mendizábal estos monjes se dedicaban en Andalucía a la cría de bravo y de caballos, entre los cuales aún hoy tienen fama los cartujanos. Se añade en 1850 la vacada de Jerónima Núñez de Prado (Cabrera) y dos sementales de Vistahermosa en 1860. A esta cruza hay que añadir la aportación de la sangre navarra a través de un semental regalado por el torero Lagartijo y otro (castaño ojinegro) que regaló el propio duque de Veragua. Además, han añadido aportación genética del semental «Banderillero» de la marquesa de Tamarón (Parladé) y otro del Conde de la Corte.

Pelaje y características en la lidia

La leyenda de este toro, el más indómito del campo bravo, ha sido forjada a través del tipo diferenciado y único de un toro con reminiscencias ancestrales. Las cruzas originales han dado como resultado un toro singular: alto de agujas, "agalgado" o levantado del suelo, largo, de gran caja, huesudo, manos y patas altas, fino de piel y algo lavado de cara.
Su pelaje aporta otra gran singularidad dentro de su variedad: cárdenos, colorados, castaños, sardos, salineros, girones, salpicados, berrendos, luceros, negros zaínos y mulatos. No es un toro astifino, sino de mazorca ancha, gruesa y generosa.
En la lidia es un toro cambiante, nervioso, que aprende mucho y rápidamente, de lidia despierta. También saltan toros de nobleza y fijeza, sin duda alguna por la aportación de la sangre parladeña. Toro espectacular desde su salida a la plaza y en el primer tercio. Sin duda, uno de los toros más ágiles que existen y más difíciles para torear.

Toreros relacionados

Miura es un apellido unido a la Fiesta de los Toros desde tiempos pretéritos. Una leyenda salpicada de sucesos luctuosos, como los dramas de Pepete, Llusío, El Espartero, Domingo Dominguín, Faustino Posadas, Pedro Carreño y Manolete en Linares (Jaén) en 1947.

Legado

El fabricante de automóviles italiano Lamborghini, que suele tomar palabras de la tauromaquia para nombrar sus modelos, cuenta entre ellos al Lamborghini Miura, en referencia al encaste

Francisco Montes "Paquiro", la revolución necesaria

  Francisco Montes "Paquiro", la revolución necesaria. Datos biográficos; por Rafael Cabrera Bonet; del Aula de Tauromaquia III, Universidad San Pablo-CEU, curso académico 2003/2004.
 
Francisco Montes, 1805-1851
 
 
  Al dar el tercer pase de muleta al primer toro que se lidiaba en la corrida 16, el día 21 de julio de 1850, enganchó el bicho al diestro por la pantorrilla izquierda, arrastrándole como unas seis varas, haciéndole algunas contusiones en la cabeza y pecho. Tuvo lugar esta desgracia entre los tablones 4ª y 6ª partiendo de la puerta de caballos a la llamada de alguaciles. El toro pertenecía a la ganadería de D. Manuel de la Torre y Rauri; se llamaba Rumbón, de pelo retinto, de algunas libras. Había llevado tres pares y medio de banderillas de fuego. Después de la cogida de Montes tuvo que matarlo Redondo, quien tras de un pase al natural y otro de pecho le dio una soberbia estocada. (Ramón Medel).
 
  Vimos a la hora de las cinco, que era la marcada, romper plaza al toro llamado Rumbón, de edad de siete años, pelo retinto y bien puesto; nada bueno fue por cierto el bicho, pues aun cuando su presencia y salida indicaban algo de provecho, nos quedamos con nuestras ilusiones, no haciendo más que tomar dos varas de Gallardo y otras tantas de José Muñoz, sin ser posible que pasara adelante su valor, y claro es, que el Presidente dispuso castigarlo con banderillas de fuego, clavándosele tres pares y medio. Llegó a la muerte, y no parece sino que nuestro querido Montes tenía algún fatal presentimiento, pues aunque le vimos marchar a la fiera con aquella arrogancia propia de un veterano que en más de cien combates se ha llevado la palma de su valor y pericia, sin embargo, su paso era lento. El toro se había hecho de un sentido extraordinario, y arrancaba fuera de su terreno, haciendo más por el bulto que por los capotes, y adquiriendo cada vez más querencia a las tablas: en este estado el maestro le dio un pase al natural, y otro muy rápido de pecho (de defensa), quedándose bien corto y parado para el segundo al natural, que al dárselo lo enganchó el animal por la parte superior de la pantorrilla izquierda junto al atadero de la liga, de cuya herida se retiró [...]. Acto contínuo tomó el estoque Redondo, y lo mató de dos pases al natural, y uno de pecho, saliendo en todos con piernas, de una muy buena recibiendo, lo que le valió infinidad de aplausos. (Revista El Clarín).
 
  La evolución de la herida fue bastante azarosa. El Clarín se ocupó de hacer un auténtico seguimiento del paciente, y así, en forma de última hora ese mismo número recoge que: "Antes de anoche la pasó muy mala Francisco Montes: a las doce fue preciso sangrarlo, y hasta las ocho de la de ayer tenía más bajo el pulso, y la fiebre era menos violenta. La herida seguía su curso  natural: otra le ha sido descubierta, por encima del tobillo. Se le prodigan todos los cuidados posibles, y no lo abandonan un momento sus numerosos amigos".
 
  Precisamente porque es valiente y sereno en el peligro, precisamente porque atesora la inteligencia de los más celebérrimos toreros de la antigüedad, precisamente porque en el concepto de los conocedores aventaja a todos ellos, se ve en la necesidad de tener que sostener a todo trance esta reputación colosal, y en todas las carreras del mundo no siempre está el hombre del mismo temple. Además, Montes lleva ya medio siglo debajo de la coletilla, es decir 25 años en cada pantorrilla, que no deja de ser gran estorbo para correr, y es sabido que su vista está muy lejos de ser de lince. Todas estas circunstancias unidas a que suele haber a veces toros tan malos que ningún caso hacen de la muleta y solo se dirigen al bulto, y que para estos bichos más sirve la ligereza que el saber, hacen que el mejor diestro se vea muchas veces en el compromiso de apelar a una desordenada fuga, y aun tomar el olivo si tan grave es el aprieto. El público premia siempre semejantes lances con una silba; pero generalmente suelen decir los espadas: "Una silba no duele tanto como una cornáa" Esto se dice; pero no cuando se tiene una reputación como la de Montes. Por esto se le ve siempre impávido sin huir jamás, sin tomar nunca el olivo. He aquí porque creemos que en todas las corridas está Montes en inminente peligro. (Ayguals de Izco, testigo de su reaparición y fatal cogida).
 
  A ello habremos de sumar el abuso que Montes hacía del alcohol, en concreto, según algunos de sus contemporáneos, del aguardiente. Siempre se ha dicho y mantenido que lo hacía para olvidar su posible fracaso matrimonial, pero nada hay seguro de ello. Su mujer, Ramona de Alba, eso sí, para dar más correa al asunto, acabaría casándose cinco años más tarde con el picador Francisco Puerto. ¿Pudo ello tener un antecedente que amargara los tiempos finales de Paquiro? Pudo ser porque de ello siempre, e incluso sus contemporáneos decían... callando. Sólo veladas alusiones, pero a todas luces bien dirigidas, nos indican ese triste camino. En todo caso, lo que es un hecho cierto es que a Montes se le vio muchas veces abusar de los licores, y que más de una vez se le veía resacoso o incluso bebido en algún festejo, sobreponiéndose en base a sus facultades físicas pero sobre todo intelectuales en el toreo.
 
  Paquiro se retiró a su patria natal, Chiclana, en septiembre, y fallecería allá tan solo unos meses más tarde, el día 4 de abril de 1851, sin haberse recuperado por completo de las consecuencias de la cogida. Murió de lo que en la partida de entierro se denominaron unas "calenturas malignas", fiebres sin filiar que no le habían abandonado en este último período de su vida, y que quizás estuviesen motivadas por infecciones contraídas durante la cogida, o por el mal estilo de vida que Montes llevó durante sus últimos años de existencia.

Más de 1.000 reservas de nuevos abonos en Las Ventas


 

Esta cifra supone el 36 por ciento de los abonos susceptibles de ser reservados

Un total de 1.013 reservas de abonos se han producido durante el proceso puesto en marcha por Taurodelta el pasado 20 de febrero y que concluyó el pasado domingo 23 de marzo. Esta cantidad supone el 36% de los abonos disponibles, susceptibles de ser reservados.

Estos aficionados que realizaron la reserva hicieron efectivo el pago del 10% del importe de los abonos elegidos y deberán formalizar esa reserva durante el proceso de renovación que comenzó el pasado martes 25 de marzo. El plazo para la adquisición de nuevos abonos se abrirá, pasado el actual proceso de renovación, entre los días 23 y 25 de abril, ambos incluidos.

La oferta de reserva de abonos para la próxima Feria de San Isidro, que se inició con el objetivo de deshacer la percepción de inaccesibilidad a nuevos abonos en la Plaza de Madrid, puso a disposición de los aficionados un servicio de atención telefónica y un equipo comercial específico.